Nuestra Misión

Descubrir junto con nuestros usuarios las herramientas necesarias para aliviar el dolor, vivir la realidad y perdonar el pasado. Encontrar juntos la manera de usarlas en armonía con las aspiraciones personales a futuro, sin olvidar el sentido familiar y social de la vida.

Visión del Equipo

Ser un lugar seguro, nuestro grupo, el sitio en Internet y los servicios profesionales individuales, para que quien sufre tenga sosiego, desahogo, donde callar y donde hablar. Mantener un perfil formativo actualizado y útil. Descubrir junto con el usuario los medios para vivir mejor y ser más felices, personal, familair y socialmente, construyendo, alimentando y manteniendo una comunidad de ayuda mutua permanente en el tiempo y flexible ante los cambios.

 

Valores

Profesionalismo. Somos profesionales estudiados, entrenados y motivados para servir a personas que sufren por una pérdida. Los miembros de nuestro equipo, provenientes de varias facetas de formación profesional, tienen en común la formación específica en la materia.
Honestidad. Somos sinceros y claros al comunicar nuestras posibilidades y limitaciones. Reconocemos que todo cambio reside en la propia persona y asumimos nuestra condicion de simples instrumentos de ayuda.
Ética. Respetamos sin excepción su privacidad y confidencialidad. Reconocemos, sin embargo, la necesidad de asesoría mutua con otros expertos para mantener la excelencia a su servicio. Hacemos todo lo posible para atenderle prontamente, con calidad y calidez. Nunca nos ostentaremos como algo que no somos.
Congruencia. Al ir descubriendo el mapa para un cambio positivo, pregonamos lo que hacemos y hacemos lo que pregonamos. Amar al prójimo como a sí mismo implica hacer lo que se recomienda, con las variantes particulares de la realidad personal de cada individuo. Así como platicamos la plática, así mismo caminamos el camino. Nuestros dichos son respaldados por los hechos.
Humildad. Somos lo que somos, ni más, ni menos. No somos los únicos, ni siquiera los mejores. Somos lo que hay delante de sus ojos y a su alcance aquí y ahora. No sabemos todo, no somos perfectos. Desde nuestra visión parcial de la realidad, puede parecer que algunas veces fallamos, y humanamente de seguro que fallamos, aunque la intención nunca será el fallarle a usted. Reconocemos de manera unánime ser Hijos imperfectos de un Padre Perfecto. Nos valemos de una parte del Amor de ese Padre y recreamos nuestra vida llevándole a los demás ese amor, en nuestra propia medida humana y terrena.